Hoy en día tenemos claro que hay una gran cantidad de prácticas, técnicas y buenos hábitos que nos pueden ayudar a mejorar nuestra salud, nuestro estado emocional y nuestra calidad de vida en general. Entre estas prácticas el yoga es una de las más populares y más practicadas en todo el mundo, pero el Reiki también ha comenzado a llamar la atención de muchas personas.
Es más probable que conozcas el yoga que el Reiki, pero en este artículo te hablaremos sobre estas dos prácticas para que tengas una visión más general de ambas y así puedas determinar cuál se adapta mejor a tus necesidades, aunque también podrías practicar ambas.
Normalmente estas técnicas suelen ser empleadas como una terapia o complemento de una para que las personas puedan mantener su cuerpo y su mente más saludables, con un mejor equilibrio.
Como ya mencionamos anteriormente, ambas prácticas pueden representar múltiples beneficios para tu vida, pero por falta de tiempo es posible que te estés preguntando sobre cuál de ellas deberías de practicar. Es por eso que te explicaremos de forma breve y clara en qué consiste cada una de ellas.
¿Qué es el reiki?
Esta práctica consiste en armonizar el cuerpo y la mente de una forma natural utilizando la propia energía que tiene el cuerpo. En la mayoría de las ocasiones se hace escuchando música reiki y aprendiendo a controlar la energía vital de nuestro cuerpo con el objetivo de ayudarnos a tratar cualquier problema que tengamos, tanto físico como mental.
Se ha comprobado que puede ser muy útil, por lo que incluso grandes organizaciones internacionales de la salud la han catalogado dentro de la medicina alternativa como un buen complemento para tratamientos tradicionales. S una práctica no invasiva que ayuda a que la persona pueda encontrar un correcto equilibrio que permita que su energía fluya mejor, lo que termina teniendo un impacto en su salud física y mental.
¿Qué es el yoga?
Dentro de la práctica de yoga nos podemos encontrar con distintos tipos, pero de forma general podemos decir que es un ejercicio que consiste en realizar distintos tipos de posturas que tienen una relación entre el cuerpo y la mente, así como con distintas formas de controlar la respiración.
Las posturas suelen ir de menor a mayor grado y con ellas se pueden obtener múltiples beneficios, comenzando por el fortalecimiento de los músculos, obteniendo buenos resultados de tonificación cuando se practica de forma regular y cuando forma parte del estilo de vida de la persona.
También sirve para brindar un mejor control, ya que nos ayuda a controlar mejor nuestra mente para poder alejarnos del estrés, ansiedad y otras sensaciones negativas que podrían afectarnos.
Como puedes ver ambas prácticas pueden llegar a ser muy buenas y puedes practicar las dos, o puedes hacer unas pruebas para ver con cual te sientes mejor.